Educación, herramienta para combatir la avalancha de información falsa

Por: Laura Sepúlveda

Inicia Coloquio Internacional de Bibliotecarios en la FIL

 

La única manera de contrarrestar la epidemia de noticias falsas es tener un sistema educativo proactivo, sólido, que forme a niñas, niños, jóvenes y adultos que sean críticos, con pensamiento reflexivo, que sean capaces de diferenciar lo falso y lo verdadero, que puedan hacer una evaluación para detectar cuál es la información objetiva y cuál es imparcial.

 

Esto lo expresó la miembro del Instituto de Investigaciones Biotecnológicas y de la Información de la UNAM, doctora Estela Morales Campos, en su conferencia “Información, noticias falsas y las bibliotecas”, que formó parte de las actividades del Coloquio Internacional de Bibliotecarios “Bibliotecas sin fronteras”, inaugurado en la Feria Internacional del Libro (FIL) 2020.

 

“Es lo único que nos podría llevar a ser un pueblo participativo y democrático. Mientras el ciudadano no esté capacitado para diferenciar entre lo falso y lo verdadero, entre lo manipulado y lo realmente objetivo, no lograremos un éxito total”, explicó.

 

Dijo que en esta época de pandemia no podemos hablar de bibliotecas, ni de ninguna otra tarea, si no la ligamos con lo que estamos viviendo, a una pandemia y todas las tragedias que conlleva porque afecta a todos los sectores de la vida, el primero, el sector salud, así como a la educación, economía, movilidad, ciencia, tecnología, ciencias sociales y las humanidades.

 

“El uso ético de la información y los principios éticos de la salud deben de caminar de la mano para poder evitar las noticias falsas, para separarnos de ese mundo tan complejo de las fake news, tanto en lo público, lo privado, lo individual y lo colectivo”, apuntó Morales Campos.

 

Destacó la importancia que de que las bibliotecas públicas, en este periodo de pandemia, nunca dejaron sola a su comunidad y enfatizó en la necesidad que tienen las bibliotecas de analizar cómo están ofreciendo sus servicios ante una nueva realidad.

 

En la ceremonia inaugural del coloquio, el Rector General de la Universidad de Guadalajara (UdeG), doctor Ricardo Villanueva Lomelí, declaró que el periodo de emergencia sanitaria ha generado nuevas formas de comunicación, aprendizaje e intercambio entre los individuos, y a pesar de los desafíos que ha planteado la pandemia y de que las bibliotecas alrededor del mundo han estado cerradas, los bibliotecarios se han esforzado para mantener activa la prestación de servicios de manera virtual.

 

“En tiempos de pandemia las bibliotecas ofrecen diversos servicios a la sociedad, por lo que representan un importante apoyo a los procesos de formación, investigación y difusión cultural. La pandemia nos ha expuesto a experiencias de aprendizaje disruptivas en todos los ámbitos educativos, en los que hemos aprendido, a marchas forzadas, a gestionar la virtualidad con propósitos formativos. Después de esto, las bibliotecas no serán las mismas, estoy seguro de que todos están aprendiendo de esta experiencia y regresarán a sus bibliotecas para hacerlas más abiertas y más cercanas que antes”, indicó.

 

El vicerrector ejecutivo, Héctor Raúl Solís Gadea, expresó que no podemos hablar de ciudadanos activos sin que las personas tengan la capacidad no solamente para saber dónde está la información, sino para gestionarla de manera adecuada, para discriminar entre ella lo que es relevante, lo que constituye un conocimiento pertinente para que puedan entender mejor el mundo, convertirse en agentes de cambio y asumir una postura crítica.

 

El Director del Sistema Universitario de Bibliotecas de la UdeG, doctor Sergio López Ruelas, precisó que el desarrollo de Internet y la multimedia han transformado tanto la práctica docente como los modos de registro, almacenamiento, distribución y resguardo del conocimiento, así como el ejercicio profesional de los especialistas en el tratamiento de la información, y la biblioteca se ha convertido en un medio a través del cual los usuarios cada vez más interconectados crean conciencia sobre la importancia de la información de manera objetiva e imparcial.